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Contenidos específicos para redes sociales

No nos cansamos de recordar que para que una campaña de marketing online sea eficaz, debemos prestar mucha atención a la calidad de los contenidos.
Por mucho que invirtamos en anuncios y promociones en Google o Facebook, al final los nuevos seguidores que consigamos los vamos a fidelizar con contenidos relevantes que sean de su interés.
El contenido específico para redes sociales, aunque sea de calidad, tiene diversos factores que condicionaran su éxito: el día y la hora en que se publica, el grado de conocimiento de la red social, el contexto o la actualidad.
Pero ¿cuáles son los principales elementos que determinan que un contenido sea eficaz en las redes sociales? Cómo conseguir que nuestro contenido triunfe en Facebook, Twitter, Instagram, Pinterest o Youtube?

  • Contenido original y creativo: El contenido puede ser propio referido al producto o servicio; Contenido de terceros que pueda interesar a nuestro público; Contenido propio que genere interés a nuestra buyer persona que no haga referencia explícita a nuestro producto o servicio pero que despierte la curiosidad del cliente.
  • Diversificar los formatos del contenido: Es importante no ofrecer siempre el mismo contenido. Se pueden alternar vídeos, imágenes, música o links. Las opciones nos las marcará el tipo de cliente, la clase de producto o servicio, la red social o nuestro público. Los vídeos y las imágenes son las que mayor repercusión tienen.
  • Planificación y calendario editorial: Tan importante es tener un buen contenido como saber cuándo publicarlo. La planificación no puede faltar, pero tampoco debe encorsetar, ya que debe haber margen para imprevistos y reacciones a la actualidad. Debemos estudiar cuando les gusta consumir el contenido que se propone.
  • No ser repetitivos: No podemos estar siempre diciendo lo mismo, seremos penalizados por las propias redes y aburriremos a nuestro público. Es importante combinar contenido, ser variados, proponer contenidos interesantes. No sólo debemos mostrar nuestro producto o servicio. Tenemos que ser capaces de transimitir nuestra filosofía de forma amena.
  • Segmentar y optimizar contenidos: Deben destinarse recursos a conocer a las buyer personas, saber qué necesitan y afinar a la hora de dirigirse a ellas. Ofrecer a nuestro cliente lo que necesita en cada momento. Generar contenidos con valor.
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